Pizzas y candados
Inauguro aquí solemnemente la serie "Memeces que me sacan de quicio" (para la que se agradece cualquier aportación)
Y lo hago por la puerta grande.
Aquí, en elmundo.es, podéis leer la noticia completa. Os la resumo para los más vagos y/o atareados:
La asociación de consumidores FACUA pide la retirada de un anuncio de las pizzas Casa Tarradellas porque en él una abuela prepara una pizza a un niño y éste la engulle de un modo "tan rápido que la mujer ni siquiera repara en ello." Según FACUA, la pizza de tamaño normal que comercializa la marca tiene un peso de 425 gramos, de los que 32 gr son grasas y aportan nada menos que 952 kilocalorías, la mitad del aporte calórico que necesita un niño al día."
Aclaremos que el niño engulle la pizza, no a la abuela. (FACUA no ha calculado qué porcentaje del aporte calórico diario mínimo supone el engullir a la propia abuela. Creemos que seguramente depende de la composición en grasas de la susodicha familiar).
Para mentes poco retorcidas, lo que opinan en esta asociación es que, al mostrar que un niño se zampa una pizza muy rápido, los espectadores más jóvenes pueden seguir el ejemplo.
Guay.
Es decir, se entiende que, a partir de ahora, los señores de la asociación de consumidores deben ser consultados para elegir el tamaño de la pizza que se debe emplear en el anuncio (¿Tal vez también su composición? ¿Mejor Cuatro quesos? ¡Aparta de ahí esa Barbacoa!) y deben estar ahí para el montaje definitivo (Introduzcamos ahora una elipsis temporal - un elegante plano del reloj, sugerimos - para mostrar que han pasado quince minutos desde que el chico comenzó a ingerir su frugal pizza vegetal hasta que la abuela se da cuenta de su "travesura").
¿Qué hubiera sido del Piraña de Verano Azul con estos tipos de FACUA por ahí? ¿Se hubiera llamado el Sardina? ¿Se hubiera podido meter al mar o hubiera estado toda la serie en la toalla "haciendo la digestión"?
Este ejemplo tomado de la publicidad, tal vez nos parezca lejano por ahora, pero no creo que esta "corrección política" mal entendida, tarde en llegar a la ficción. Y lo peor de todo es que muchos anunciantes, productores, cadenas de televisión, etc. pueden preferir ceder a estas presiones antes que arriesgarse a sufrir una campaña negativa en los medios.
El tipo que puso en el anuncio una porción de pizza demasiado grande, ése es el que tiene la culpa de que mi hijo esté gordo.
No yo, por supuesto. Tampoco el crío. Ni la herencia genética ni su metabolismo.
De eso nada.
El que tiene la culpa es el del anuncio.
Mi consejo: si su hijo se zampa todo el contenido de la nevera cada noche, pónganle un candado.
Y a la nevera también.
Pero, por favor, no nos lo pongan a nosotros.
Actualización (6-12):
Casa Taradellas se ha comprometido a no volver a emitir el anuncio en cuestión. La noticia en El País.com deja lugar a varias interpretaciones; si ha sido por la presión de las asociaciones de consumidores o, simplemente, porque el anuncio ya había agotado su recorrido.
En cualquier caso, no parece que vaya a ser un caso aislado. Me temo que van a seguir protegiéndonos cada vez más.
8 Comments:
Yo creo que FACUA no hace nada malo: sólo está ejercitando su derecho constitucional a decir gilipolleces.
Y está bien: esto sirve, aparte de para generar posts tan divertidos como éste, para que todo el mundo se de cuenta de lo inservible, ridículo e hipócrita que es su discurso.
Y ahora me voy a zampar una cuatro quesos con cocacola. Ni light ni pollas.
Sin ánimo de reprimir derechos a nadie, me sumo a la preocupación de Dani por la corriente de "corrección política" y la proliferación de "guardianes de todo" que se nos viene encima. He vivido en EEUU el estallido de todo esto. Lo que comenzó con loables intenciones se ha ido de madre y se ha convertido en una máquina de censurar, vigilar, manipular, etc. Una cosa tan banal y ridícula como lo de FACUA es sólo la punta del iceberg de lo que nos puede llegar como Dani muy bien apunta. Me parece guay que los guionistas usemos nuestro talento para poner esto en evidencia como hace Dani en este post tan divertido.
El piraña haciendo la digestión durante toda la serie. Eso es el germen para una sitcom, dani. :)
Hoy me acuesto reído.
Es un soberana gilipollez. Si todos los mecanismos narrativos de los spots son sometidos a un criterio tan nazi y estúpido como ese, no quedará un anuncio en pie. Además, los de la Facua no han visto a mi sobrina comerse un trozo de pizza...
no entraré en si facua hace bien o no en quejarse del anuncio de las pizzas
pero en otros anuncios, como el de renfe de: "viajes en días azules"
pues bien podría quejarse para decir que los días en renfe son más bien negros
o el anuncio de renfe: súbete al tren
facua bien podría decir: no puedo, está lleno
Y ahora los políticos se unen a esta gilipollez de la correción alimenticio-política intentando prohibir los anuncios del Whopper XXL. Esta gente le da demasiada importancia a los anuncios, será que ellos no tienen capacidad crítica y hacen todo lo que la tele les dice que hagan. ¿En qué manos estamos, Dios santo?
Necia, tonta, vanidosa, ridículamente engreída. O sea, FATUA.
Dios, ¿peligra entonces mi programa?
Joder, que tenemos a Flo de presentador!
Ya les oigo llegar...
Ya están golpeando las puertas!!
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