30.11.07

Ahí estaré

Finalmente, he podido cambiar de hora el ensayo para el corto, así que, si no hay ningún imprevisto, estaré en la reunión de ALMA de este sábado a las 12 en el Cine Doré (no, no soy socio, pero la convocatoria es abierta a todos).
Si os apetece, podemos tomarnos una caña luego y comentar el asunto. Me reconoceréis: soy el tipo que, cuando está distraído, canturrea en serbocroata.

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27.11.07

¿Huelga?



Ya lo habéis visto en casi todas partes...

...este sábado 1 de diciembre a las 12h, la asociación de guionistas ALMA convoca a todos los interesados a una reunión para hablar sobre nuestras condiciones laborales. Será en Madrid, en el cine Doré (Filmoteca Española).

Si tuviera el talento del pianista y un poco de tiempo libre, hubiera escrito un post como el que nos regala esta semana el del burdel. Es imprescindible, de verdad.

Estoy muy de acuerdo con él: el año pasado se aprobó la reforma de la Ley de la Propiedad Intelectual que sigue sin adjudicar ni un euro de las ventas de DVD a ninguno de sus autores (guionistas, directores, músicos).

Esta ley tampoco reserva para los autores ningún ingreso si su obra es difundida por alguno de los nuevos medios (Internet, móviles...)

Ni un euro.

Siendo muy diplomático, diría que las protestas de las asociaciones de guionistas y entidades de gestión fueron entonces, como mucho, discretas.

Ahora, más de un año después, se convoca una reunión... porque "nuestros compañeros norteamericanos" se han puesto en huelga.

¿No hubiera sido más lógico convocar este tipo de asamblea y discutir medidas de presión cuando se estaba tramitando la ley?

Creo que está claro que sí.

De todos modos, aunque los motivos y el momento de la convocatoria no sean los más indicados, me parece que nunca está de más una buena reunión de guionistas.

Uno se puede tomar una caña con colegas a los que creía muertos y, si es moderadamente guapo, vuelve a casa con un poco más de autoestima.

Lamentablemente, me temo que no podré estar allá (tengo ensayos para mi corto previstos para ese día).

Ya que se ha establecido la comparación con "nuestros compañeros norteamericanos" creo que habría que mencionar un par de diferencias que de vez en cuando se olvidan:

- En Estados Unidos no puedes trabajar de guionista si no estás afiliado al "Guild" (creo que "gremio" sería la traducción más literal). Tienes que pagar una cuota pero el gremio te asegura unos beneficios sociales (sanitarios, etc) además de defender tus derechos; haciendo que los convenios de salarios mínimos se cumplan, por ejemplo.

- Ese gremio es una agrupación profesional, no política. No veréis carteles contra la guerra de Irak o banderas sudistas en esas protestas callejeras. Lo que se pretende es ver reconocidos unos derechos (es decir, ganar más dinero), no subvertir el régimen parlamentario o cambiar el rumbo de la política exterior del país.

- Quien trabaje como guionista durante el tiempo que dure la huelga corre el riesgo de ser expulsado del gremio y, por lo tanto, de no poder volver a ejercer esta profesión en los Estados Unidos.

- El compromiso de los guionistas norteamericanos está siendo espectacular. Ken Levine y John August, por ejemplo, narran en sus respectivos blogs cómo se incorporan a las 5.30 de la mañana a un piquete para pasar el día recorriendo la acera frente a los estudios, agitando pancartas y reclamando a los conductores que toquen la bocina. Por lo que parece, en esos piquetes uno se puede encontrar a una tipa que retocó hace años unos diálogos de la Doctora Quinn coreando un slogan junto a J.J. Abrams. (Algunos de estos huelguistas, recordémoslo, cobran alrededor de cinco millones de dólares por guión y están dejando de trabajar para ponerse a confeccionar pancartas con cinta aislante).

En resumen, el gremio de guionistas en Estados Unidos está muy bien organizado y puede permitirse ejercer medidas de presión.

Está claro que no es nuestro caso. Por ahora.

Ojalá a partir de esta iniciativa de ALMA, o a partir de cualquier otra, las cosas comiencen a cambiar, aunque sea un poquito.


Más sobre este asunto
1. Sobre la huelga en Estados Unidos recomiendo los blogs de John August, Ken Levine y Craig Mazin
2. Sobre los derechos de autor en Estados Unidos (por qué se llaman residuals, en qué consisten las diferencias con lo de aquí, etc) os aconsejo
este post de August, traducido aquí en el blog de David Muñoz.
3. Más sobre la convocatoria de ALMA en
El Guionista Hastiado.

Podéis hacer clic sobre la imagen para ampliarla.

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24.11.07

Después de ver Studio 60 (II)



Ya sabéis que Studio 60 on the Sunset Strip es una serie de la NBC sobre cómo se produce un programa de variedades en directo muy parecido a Saturday Night Live, que emite la propia NBC desde 1975.

(Por cierto, 30 Rock, otra serie de la misma cadena trata de… lo mismo. Esta vez en tono cómico y duración de 21 minutos por episodio. 30 Rock sí consiguió renovar y se está emitiendo la segunda temporada).

La serie de Sorkin no funcionó entre el público.

No se tarda demasiado en ver porqué.

Os resumo un poquito del argumento.

Un productor y un jefe de guionistas son fichados a golpe de talonario por una brillante (todo el mundo es brillante en una serie de Sorkin) y guapa ejecutiva para que regresen al programa “Studio 60”, el mismo del fueron despedidos cuatro años antes por emitir un sketch considerado "poco patriótico".

Estos inteligentísimos amigos: Matt y Danny (Matthew Perry, el Chandler de “Friends” y Bradley Whitford, el Josh de “El Ala Oeste”) toman las riendas del programa y consiguen que la audiencia mejore.

El problema es que… esos sketches tan divertidos que están resucitando el programa… no resultan nada divertidos.

Peor aún, son sketches malos y con pretensiones. Están cargados de “mensajes” críticos, especialmente, contra la derecha religiosa norteamericana.

Como en toda serie de Sorkin (y su inseparable productor y director Thomas Schlamme), los personajes no dejan de moverse a toda velocidad por un gigantesco escenario sin dejar de pronunciar eternas e ingeniosísimas parrafadas que un mortal apenas podría comprender (no digamos ya responder con el mismo o mayor ingenio).

El contraste es curioso: todo lo que son capaces de escribir esas brillantes mentes son esos número cómicos tan llenos de pretensiones y tan escasos de gracia.

(Afortunadamente para todos, los sketches fueron desapareciendo progresivamente de la serie. Sin embargo, ya era tarde: el público había dado la espalda a "Studio 60")

Tal vez es que el humor y el “mensaje” no se llevan demasiado bien.

Y tal vez es que, en el fondo, lo que le va a Sorkin es la épica. La lucha de un equipo admirable trabajando duro.

La cuestión es que en “El Ala Oeste” los personajes discutían sobre la conveniencia o no de atacar un país. En “Studio 60” más o menos con el mismo tono intenso y grave, hablan de... si conviene incluir un sketch o no.

No es lo mismo, ¿verdad?

Quienes esperaban que ésta fuera una serie ligera y cómica sobre un programa ligero y cómico se sintieron decepcionados.

Con razón. Porque, en el fondo, “Studio 60”, y se va viendo más y más conforme la serie avanza, habla de otras cosas.

En gran medida, "Studio 60" trata de lo difícil que ha sido escribir en los Estados Unidos en los últimos años.

Sí, desde el 11-S, cómo no.

La serie nos presenta unos Estados Unidos… divididos. Rotos entre una derecha conservadora y cristiana y una izquierda liberal que, a pesar de ser despreciada por (y despreciar a) la primera, es la encargada de entretenerla.

Nos habla de cómo la religión va tomando el control del ámbito público y cómo los no creyentes comienzan a sentirse aislados en su propio país.

Sin embargo, Sorkin coloca a los personajes más escépticos en materia religiosa, en situaciones que les hacen desear tener fe, tener un dios al que rezar.

La serie nos habla también de cómo, poco a poco, una mitad del país se apropió de los símbolos nacionales, que no dudó en utilizar para sacudir con ellos a cualquiera que se atreviera a criticar a su presidente. (Por ejemplo, por lanzarse a una guerra mal concebida. Sí, se habla de la guerra en la serie, Sorkin tira al monte...)

En uno de los primeros episodios, un viejo entra en el teatro en el que se graba el programa y trata de llevarse una foto en blanco y negro. Los servicios de seguridad le detienen antes de que lo logre. Después de un largo rato en que el hombre parece delirar, logran sacar en claro que… el viejo era uno de los de la foto. Uno de los antiguos guionistas del programa, víctima de la caza de Brujas del senador McCarthy.

McCarthy les acusaba de comunistas, rojos o antipatriotas.

Muchos años más tarde, el gobierno y su partido empleaban esos mismos adjetivos para descalificar a quienes, simplemente, se oponían a ciertas decisiones políticas. Pasó hace muy pocos años en Estados Unidos.

Pero no sólo allí.

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19.11.07

¡Barra libre!

Lo malo de las normas es que hay que cumplirlas. Al menos, la mayor parte del tiempo.

Cuando comencé con este blog me fijé una: no convertirlo en la típica página personal en la que uno cuenta qué ha comido ese día, si consiguió ligar ese fin de semana, o si lleva siete horas mirando al techo…

Es decir, intenté que todos los contenidos tuvieran que ver, aunque fuera lateralmente, con la escritura de guiones para cine y televisión.

Cuando me he saltado las normas, ha sido por una causa justificada, creo yo. Por ejemplo, para daros envidia cuando estaba de vacaciones.

Por si os habéis olvidado, era en esta playita.



Estaba justificado publicar la foto, ¿verdad?

Durante todo este tiempo, me he contenido para no escribir sobre política, música, baloncesto o cualquier otra cosa de las que me interesan.

Hasta hoy.

Hoy estoy indulgente.
Así que me voy a dar dos lujos:

1. Bajaré al argentino de Eloy Gonzalo a regalarme un buen desayuno con café, facturas y zumo de naranja (a pesar de que alguna de estas tres cosas me sienta mal al estómago, tengo que averiguar cuál es)…

y 2. Me concederé barra libre en el blog: escribiré un post que no tiene nada que ver con el guión. Nada.

Voy a recomendar algunas cosas que me gustan.
¿Listos?

Música

Últimamente no dejo de escuchar dos discos.

El primero es el de Benjamin Biolay, un francés de unos treinta años con un gran talento para las canciones elegantes, románticas y muy orquestadas

Aquí está su página en myspace. Por desgracia, no puede escucharse mi canción favorita del último disco “Bien avant” (con su estupenda letra, “antes de que nos conociéramos, antes de que nos hablarámos, yo ya sabía que te odiaría, (...) antes de que nos quisiéramos... tú ya no me querías” - ¿Tal vez dedicada a su ex, Chiara Mastroianni?).

Fue mi amigo Jaime quien me pasó el primer disco de Biolay, “Rose Kennedy” (imprescindible, por cierto), hace ya demasiados años. La mejor canción era “Les cerfs volants” (Las cometas). Disfrutad del vídeo.




Ahora, Jaime, en lugar de pasarnos cintas a los amigos, graba un podcast con la selección de música (sobre todo pop) más exquisita que uno pueda imaginar. Podéis descargarlo desde aquí.

El otro disco que no dejo de escuchar últimamente es “Everything all the time” de Band of Horses. Después, han sacado otro disco que está muy bien, pero “Everything all the time” me gusta más. Y de él, una de las mejores canciones es “The Funeral”.




He conocido a Band of Horses (y a unos cuantos grupos más) gracias a Fernando Navarro, otro amigo, que acaba de comenzar con su blogTambores y pistolas”. Se centrará sobre todo en música norteamericana aunque a veces hará pequeñas excepciones. No os lo perdáis, Fernando tiene un gusto infalible.

Internet

Últimamente me he dado cuenta de que apenas enciendo la tele. Me paso el día ante el ordenador (incluso las series las veo en el monitor, no sé para qué me dejé esa pasta en la pantalla plana).

Gran parte del tiempo lo paso leyendo blogs o páginas que tienen que ver con el cine y la tele, pero eso ya lo suelo enlazar habitualmente. Así que, como hoy estoy de barra libre, os recomiendo algunas de mis otras favoritas.

No sabría describir qué es exactamente el blog de Arcadi Espada. Tal vez basta con decir que es una especie de cruzada diaria contra la estupidez, la superstición y el sentimentalismo. Espada podría ser… un enciclopedista de nuestro tiempo.

El blog del escritor zaragozano Daniel Gascón, al que llegué desde la página de Plot, también es muy recomendable. Comparte algo del espíritu de los "Diarios" de Espada pero está más centrado en la literatura. Muy recomendable, al igual que el bilingüe blog de Pippy, con sus delicadas fotos y breves comentarios, casi haikus, pequeñas estampas cotidianas. No podéis dejar de hacer clic aquí.

Bien, ya me vale de recomendaciones por hoy, todavía no he desayunado y la bollería argentina me está gritando “coméme” (¿se acentuaría así, no?) desde el otro lado de la calle.

Ahora es vuestro turno…

¿Qué os ha conmovido últimamente?

¿Qué páginas de Internet, revistas, discos, cómics o libros os han sorprendido?
¿Qué joyas ocultas nos queréis recomendar y por qué?

No os cortéis, hoy hay… ¡barra libre!

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12.11.07

El perrito bilingüe recomienda...




Como un perro fiel y bilingüe, os traigo a la mesa lo mejor de la prensa del fin de semana (sí, vale, es del fin de semana, nadie dijo que el can además de bilingüe fuera veloz).


I
Aquí, el Magazine del domingo del New York Times con una edición especial dedicada al western. Con artículos de A. O. Scott y Walter Salles (el director de "Estación Central de Brasil", que escribe sobre las películas de carretera).

El mismo especial incluye también una entrevista con Daniel Day Lewis. Al perrito tampoco le parece una figura indispensable del western pero… es que está a punto de estrenarse “There will be blood” dirigida por Paul Thomas Anderson en la que Lewis encarna a uno de los pioneros de la extracción de petróleo (por cierto, el perrito tampoco está muy seguro de que eso sea estrictamente un western).


II
En las páginas del mismo periódico, un artículo con una de esas noticias surrealistas que entretienen a nuestro perrito y le hacen mover la cola, divertido (quiero decir el rabo... vamos... ya me entendéis).

Al parecer, en Serbia se está comenzando a extender una curiosa moda.

Cuando un pueblo ya no cree en nada, cuando ha sufrido décadas de opresión, el colapso del sistema comunista, la guerra y la división del país...
Cuando todas las referencias ideológicas se tambalean...

¿En quién confiar?

¿Qué figura unánimente respetada puede ocupar el pedestal de la plaza mayor, del que hace unos años ya se descabalgó al Mariscal Tito?
¿Quién no le fallará nunca al pueblo?

Rocky Balboa, por supuesto.

Tampoco Bruce Lee, Johnny Weissmuller o (aún más surrealista) Samantha Fox.

Efectivamente, en los pueblos de Serbia ya se han instalado estatuas dedicados a algunos de estos personajes (y/o actores).

Las de Rocky y Bruce Lee en Zitiste y Mostar, respectivamente. Las otras dos están todavía en preparación.

Ya véis, crear buenos personajes trae grandes recompensas: no cobrarás un solo euro por los DVDs en los que salgan pero, con un poco de suerte, tal vez algún pueblo de los Balcanes le erija una estatua a ese secundario que creaste para "Aída" en una tarde tonta.


III
Aunque sabe que no tiene mucho que ver con este blog, nuestro perro, ya que se ha leído toda la prensa de arriba a abajo, también quiere recomendar este estupendo texto de Enric González (en El País del domingo) sobre la información y sobre ese sucedáneo barato que muchas veces nos dan en su lugar, la opinión.

Espero que os gusten las recomendaciones.

¡Guau!

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Después de ver Studio 60 (I)




Bien, hace ya unas cuantas semanas acabé de ver la primera y única temporada de “Studio 60 on the Sunset Strip”, la última serie de Aaron Sorkin, mi guionista favorito.

¿Guionista favorito? Hmm… eso suena un poco adolescente, ¿no? Parece como si tuviera una foto suya en mi carpeta.

Bueno, si tuviera carpeta, tal vez estaría su foto.

De momento, ya estoy empezando a dejarme las ojeras como él.

Para mí, una serie de Sorkin es puro espectáculo. Eso sí, no hay coches estrellándose, ni cuentas atrás vertiginosas.

Una serie de Sorkin es una espectacular e impúdica exhibición de inteligencia.

No es que "Perdidos" o "Los Soprano" estén escritas de manera menos inteligente. Ni mucho menos.

La cuestión es que, en mi opinión, "El Ala Oeste" o "Studio 60" son, en gran parte, series sobre la inteligencia.

Una serie de Sorkin es una serie para adultos (no, no hay consoladores).

Adultos que no tratan de evadirse de la realidad sino de comprenderla.

Adultos que no quieren dejar de serlo. Posiblemente, al contrario, adultos que quieren ser más adultos todavía.

Este texto se está poniendo denso... y todavía viene lo peor.

Empieza...

La parte abstracta del post

(Sáltatela si estás conduciendo)

Una serie de Sorkin te trata como… si tú fueras Sorkin, o uno más de sus idealizados personajes, como si fueras una persona brillante e inteligente, divertida y articulada. Como si supieras quién es Píndaro y en qué consiste la teoría de las supercuerdas. Como si pudieras captar una broma que relaciona a Píndaro con las supercuerdas.

Hay gente (supongo que por complejo de inferioridad) que se siente agredida por tal exhibición de ingenio e inteligencia (a veces, aunque sea poco habitual, estas dos cualidades van unidas). Califican los diálogos de Sorkin de poco verosímiles (y tienen razón, son mucho mejores que los diálogos verosímiles), le califican a él de soberbio (sobre esto no tengo dato alguno). Le acusan de hacer que todos sus personajes sean reflejos de sí mismo (¿es eso una pega cuando uno es tan brillante? ¿No sería peor hacer - como muchos guionistas - que sólo los personajes protagonistas sean tan listos como el autor? - Nota para el futuro: escribir algo sobre los personajes como representación de las diferentes opiniones de un mismo autor sobre un asunto. Es decir, los personajes como funciones mentales y... la mente del autor como una casa de locos-) En resumen; la legión de detractores de Sorkin casi iguala a la de sus admiradores.

Otros espectadores (supongo que por inferioridad, sin complejos) simplemente abrimos la boca, atónitos, agradeciendo la oportunidad de poder ver una serie así. Y preguntándonos quién carajo era el tal Píndaro.

Es mi caso.

A mí me gusta que, al menos durante una hora por semana, para variar, alguien me trate como si fuera inteligente y culto.

Una serie de Sorkin me proporciona más placer que el sexo oral (activo o pasivo) o comer bombones de chocolate. Más placer incluso que una sabia combinación de sexo oral y chocolate.

(Sí, cariño, puedes intentar que cambie de opinión. De licor, sí, mucho mejor).

Una serie de Sorkin me proporciona algo mejor que beber después de un día de sed.

Me da... más sed.

Sed insaciable de conocer la realidad, de salir al mundo, de devorar libros y periódicos, de aprender idiomas, de conocer tradiciones exóticas, de estudiar teorías científicas y de buscar la palabra adecuada para completar cada frase.

Es decir, las series de Sorkin celebran la vida.

Al menos lo que yo entiendo por vida: la lucha del hombre por dominar la realidad, es decir, por conocerla.

Aquí acaba la parte abstracta del post

(Puedes volver a subirte al tractor)

Ahora Sorkin está pendiente de estrenar en Broadway (si le dejan los tramoyistas en huelga) su obra “The Farnsworth Invention”, sobre un aparato que Philo Farnsworth contribuyó a inventar.

El aparato es, cómo no, la televisión.

Por cierto, ¿habíais oído hablar del tal Farnsworth? No, ¿verdad? Yo tampoco. A esto me refería con la sed de conocimiento que despiertan las obras de Sorkin.

Aquí podéis leer una estupenda entrevista con Sorkin sobre esta obra (en inglés).

(Pronto continuaré escribiendo, esta vez sí, sobre "Studio 60")
Notas:

1. Hay partes de este post que no entiendo ni yo. No te pasa nada.

2.1 Siempre me meto en estos líos cuando pongo ejemplos: según la Wikipedia,
Píndaro era un poeta lírico griego de lenguaje especialmente elevado y difícil, aficionado a establecer asociaciones bruscas e inesperadas entre términos. Escribió unos cuantos epinicios en los que muestra los triunfos de un atleta como reflejo de la victoria de lo Bello y lo Bueno sobre la mediocridad. ¿Epinicios? Ejem... eso ya lo buscas tú mismo, guapo.

2.2 La teoría de las supercuerdas, ejem, no la entiendo. Por lo que he leído, también
aquí, en la Wikipedia, se trata de un intento de unificar varias teorías de cuerdas. Vale, de ahí lo de supercuerdas. Al parecer, la física teórica tiene problemas para conciliar la ley de la gravedad (tal y como está explicada en la teoría de la relatividad general - no, ni idea de esto tampoco) con la mecánica cuántica. Cito textualmente: "La idea básica es que los constituyentes fundamentales de la realidad son cuerdas de una longitud de Planck (cercano a 10−35 m) que vibran a frecuencias de resonancia. Cada cuerda en teoría tiene una única resonancia, o armonía. Diferentes armonías determinan diferentes fuerzas fundamentales."

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7.11.07

Español de España

El otro día, unos amigos me comentaban lo impresentables que son los productores españoles de cine.

Como siempre, les llevaba la contraria. Más que nada para animar la conversación: "Creo que exageráis un poco..." - les decía.

Pues no.

Como siempre, me equivocaba yo.

Aquí otra pequeña prueba.

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4.11.07

Más ejercicios provocadores